Desde la banca
Desde hace tiempo, los PARQUEROS reconocemos la importancia que tienen los espacios públicos verdes en el bienestar de las personas que vivimos en ciudades.
En las últimas décadas, estos espacios han afrontado dos grandes retos. Por un lado, el no ser absorbidos por la vorágine del desarrollo desordenado de las urbes y por el otro, el riesgo de no recibir suficientes recursos para su correcto mantenimiento, de manera que no terminen abandonados como focos de delincuencia. Sin embargo, vemos oportunidades importantes por capitalizar. Existe un análisis de los desarrolladores inmobiliarios que empieza a concebir a los parques como parte integral de los desarrollos habitacionales, no solo como un costo, sino como un generador de plusvalía.
En tiempos de pandemia, hemos aprendido que el confinamiento obligado en casa, la falta de claridad y fuerza del gobierno, así como el cierre total de otros espacios como escuelas y comercios no parece tener el resultado esperado. Estas medidas no solo no han logrado evitar el contagio, sino que además han ocasionado una crisis económica importante, un desbalance emocional-social tangible y una merma importante de la salud por inactividad.
Los parques son espacios que han tenido que adoptar estrategias variadas en cuanto a su operación. El común denominador es que se ha tenido que suspender todas las actividades planeadas, sin importar el tamaño del presupuesto que se les había destinado. En algunos parques, se ha pospuesto que hasta que mejoren las condiciones no se reanudarán las actividades y en otros, se han cancelado definitivamente y se repensarán en su momento. Ciertos parques han hecho un esfuerzo al incursionar en programas en línea de diversos temas, desde clases de yoga, jardinería, hasta paseos virtuales.
Parecería que requerimos un cambio de estrategia.
Sabiendo las consecuencias que el aislamiento social tiene en todas las edades, reflexionando sobre la merma en salud general que tendremos por la inactividad y sopesando que la vacunación llevará tiempo, necesitamos generar otras alternativas. Los parques, siendo espacios abiertos, son la mejor opción para que las personas puedan pasear, practicar algún deporte, ver gente, interactuar a distancia y, sobre todo, no contagiarse. Es indispensable que la visita sea responsable y no falte el uso del cubrebocas, mantener sana distancia y evitar aglomeraciones.
Propongamos a los parques como la opción más viable para atravesar la pandemia en mejores condiciones y sin incrementar los contagios. Tal vez, ahora no es tiempo de pensar en programas culturales y deportivos para los parques. En su lugar, debemos pensar en programas de salud que nos cuiden y que nos ayuden a salir de la pandemia no solo sin contagiarnos, sino también con una salud mejorada por la socialización y la activación física.
Lic. Itziar De Luisa Plazas
@ItziardeLuisa
Presidente Ejecutivo de la Asociación
Colonos ZEDEC Santa Fe AC
Responsable de Parque La Mexicana